El amor, el antídoto para la soledad
Quién más, quien menos ha vivido en sus carnes el sentimiento de soledad que anida en el corazón tras una separación o una pérdida. Es como una lanza que atraviesa el alma y quema dejando una sensación de desasosiego. La ansiedad y la desmotivación son los fieles vasallos que acompañan al lancero oscuro y así, poco a poco, el cansancio te invade desvaneciendo tus ganas de vivir.
Cuando esto sucede la salida es simple, recuerda el decreto «pedid y se os dará», ¿y qué hay que pedir?, algo tan simple y tan inmenso como AMOR. Pide al Universo este milagro para salir de la soledad.
Ya lo dice un Curso de Milagros «En lo profundo de tu interior yace todo lo que es perfecto, presto a irradiar a través de ti sobre el mundo. Ello sanará todo pesar y dolor, todo temor y toda sensación de pérdida porque curará a la mente que pensaba que todas esas cosas eran reales y que sufría debido a la lealtad que les tenía» (L41)
Esto es sencillo cuando corriges tu mente y te das cuenta que vives en la separación, que la soledad no puede existir si sientes el amor de la fuente o de Dios.
Una percepción común es creer que existe un alma gemela, como una especie de mitad necesaria que por arte de magia nos completará y llenará; esto es un mito, eso es tener un pensamiento de carencia, tú eres completo por ti mismo, no te falta nada ni nadie, las personas, las cosas, los trabajos, las relaciones sociales son meras ilusiones fabricadas por el ego para llenar ese vacío existencial y tienen su origen en el miedo. El verdadero amor está muy lejos de ser un sentimiento que nos vincula a un ser, que al ausentarse, trunca nuestra existencia o felicidad.
El Amor espiritual supone una bendición, se puede vivir en múltiples niveles, a medida que se desarrolla tu conciencia se va expandiendo y haciendo cada vez más grande hasta alcanzar la supremacía o la unidad. Es un estado mental de íntima reunión y vuelta a casa.
Por lo tanto, si sientes soledad pide Amor, obra el milagro de la transformación, el amor está dentro de ti, deseoso de expandirse como olas abrazadoras.
Abre tu corazón cada noche antes de entregarte al sueño y pídelo, abre tu mente y permite que el milagro se produzca. “Todo es Posible”, repite esta frase una y mil veces y poco a poco se disolverán patrones limitadores que viven en el seno de tus más íntimas creencias.
Y así sin más, un día te despertarás y sentirás que algo ha cambiado, de pronto te habrás olvidado de la pena, podrás sentir que algo muy sutil y sin retorno ha dado la vuelta a tu existencia. Y eso… es el amor.

Hace unos años comencé un viaje para redescubrirme. En medio de ese camino surgió la idea de hacer este blog, para contar mis historias y las historias de otros buceadores espirituales. Un sitio dónde espero encuentres herramientas que te ayuden en tu propio camino, porque la luz está en todos, sólo hay que verla.